La victoria
de Sportivo Italiano parecía ir por buen camino, pero no lo aseguró cuando
manifestaba su mejor cara futbolística y a ocho minutos del final Deportivo Merlo
le empató en una de las pocas chances que tuvo en toda la noche.
De principio
a fin, el equipo del “Tano” Pasini fue el que más buscó y el que más generó juego
en las cercanías del arco rival, aunque no concretó todo eso que insinuó,
especialmente en el segundo tiempo, y por eso terminó pagando caro un mínimo
descuido en el fondo en momentos en que pareció evidenciar el gran esfuerzo
físico.
Durante el
primer tramo del encuentro, al local le costó ser preciso a raíz de la excesiva
aceleración con la que trasladaba la pelota hacia adelante, casi sin pausa y
entonces se prestaba a un juego de ida y vuelta, ante un “Charro” que contaba
con un aceptable manejo en la zona de la mitad de la cancha, pero adelante era
demasiado inexpresivo.
Poco a poco
fueron apareciendo las ideas y tras un par de situaciones desaprovechadas salió
un saque largo de Drago desde el fondo que peinó Rojano y dominó Di Biasi ante
la marca para abrir merecidamente el
marcador.
La visita comenzaba
a mostrar ciertos descuidos tanto por el sector externo como en las cercanías
de la media luna y solo por fortuna se había ido al descanso un gol abajo
porque el autor del gol tomaba mayor confianza y, junto con Alderete, fue
amplio conductores durante una segunda etapa completamente favorable, pero
faltaba el hombre que hiciera sacudir la red.
El ingresado
Escudero estuvo cerca del empate mediante un zurdazo que el uno azzurro logró
sacar al córner sobre su palo izquierdo, aunque ese intento fue solo un
espejismo en una noche en la que no la estaba pasando para nada bien.
Fernández, al
jugar más libre que lo habitual, apareció en reiteradas ocasiones en posición
del gol, Alderete se perdía el segundo entrando al área tras pared con Rojano y
los de Ciudad Evita seguían siendo claros dominadores.
Sin embargo,
los cambios le dieron a Merlo un poco más de aire para tratar de frenar la
embestida de un equipo local que en el cuarto de hora final comenzó a sentir
los efectos del cansancio y su respuesta ofensiva ya no fue la misma.
Justamente
dos futbolistas que entraron desde el banco participaron de la jugada que
terminaría ocasionando el empate final porque Varela remató de media distancia
y Turienzo apareció muy solo capturando el rechazo de Drago para mandarla al
fondo del arco.
De esta
manera, Italiano desaprovechó la oportunidad de descontar diferencias en la
tabla de los promedios ante uno de los rivales directos, que al final de la
temporada sufrirá la quita de puntos por disposición de la FIFA.