Sin jugar
bien y aprovechando una de las escasa chances que tuvo, Sportivo Italiano se
puso en ventaja a través de Pasquale y luego debió sufrir hasta el final ante
un Argentino de Quilmes que hizo muchos méritos para alzarse con la victoria,
pero como falló en la definición no pudo quedarse ni siquiera con un punto.
Se vio un
equipo azzurro algo partido en el comienzo, con los del fondo lanzando
pelotazos largos muchas veces a dividir para los delanteros y con un medio
campo que le costaba tomar posición justa para entrar en juego. Por los dos
costados le llegaron muchas veces con espacios y tanto Vega en la zaga central
como Scalzo bajo los tres palos pasaron a tener un mayor protagonismo.
Del otro
lado, Argentino tenía sin dudas como objetivo atacar desde el primer minuto y
así fue como trató de meterse casi constantemente en el área de enfrente. Pero
el uno visitante y el palo derecho le impidieron ponerse en ventaja antes de la
primera media hora de juego, luego de la cual entró un poco en la fricción y
comenzó a cargarse de amarillas.
En el conjunto “Mate” se destacaba la labor
de Rojas tanto en la marca como proyectándose por izquierda, la seguridad y
experiencia de Espínola para apuntalar a una defensa que no corría riesgos,
mientras los dos delanteros las corrían todas tratando de provocar y aprovechar
algún error en el fondo visitante
Era muy escaso lo que había generado Italiano
en ofensiva durante el primer período, hasta que después del descanso Pasquale
capturó un remate de Ravest que quedó picando en el área y de media vuelta
cruzó un zurdazo que venció las manos del arquero para meterse contra la red.
Ese gol le dio algo de tranquilidad a los de
De Lucca para empezar a manejar la pelota contra el piso, pero Flegenal no aparecía
en su labor de conductor y Archubi no se sumaba tanto, mientras que Giménez
debía sacrificarse más en la marca y en los relevos, que en tratar de aportarle
algo ofensivamente.
El local tras quedar en desventaja pareció que iba a acusar el
golpe porque evidenció un retroceso posicional, pero a partir de los quince fue
nuevamente una constante la búsqueda del arco contrario. Sarati cabeceó apenar
por arriba, a Arias se la sacaron al córner, Valenti se lo perdió solo y el uno
azzurro se encargó de ahogar el empate en otras tantas situaciones.
Para compensar las deficiencias que dejaba a la vista, el
elenco de Ciudad Evita aportó hasta el pitazo final mucha entrega para tratar
de no tropezar y poder quedarse con el triunfo que lo vuelve a meter en la
pelea por la punta del campeonato.