“Tanos” y
“Mirasoles” no salieron de sus regulares libretos, fallaron en los momentos
decisivos y terminaron llevándose un punto cada uno, que no les alcanza para
terminar de despegar, pero al menos les sirvió para salir de perdedores.
A pesar de
los varios cambios de nombres, el esquema de Italiano casi no varió con
respecto al de las presentaciones anteriores, aunque Alderete arrancó
generalmente unos metros más atrás y Di Biasi se adelantó un poco. Ellos dos,
junto a Heredia, eran los encargados de generar el juego ofensivo y asistir a
Rojano, pero entre todos ilusionaban más de los que finalmente producían.
Mientras
tanto, el fondo del equipo de Pasini alternaba buenas y malas, mientras que el
debutante Acevedo respondía con justeza debajo de los tres palos en las pocas
oportunidades en las que le tocó intervenir.
Del otro
lado, la tempranera lesión de Rodrigo Díaz cambió enseguida los planes, aunque
el ingresado Sciorilli se las arregló para que no se sintiera su ausencia y
trataba de inquietar con su permanente movilidad.
Ante la
salida de su hermano, Román Díaz tomó la posta y de sus pies se observaba los
más claro de la tarde, a tal punto que generó las dos jugadas que casi provocan
la apertura del marcador a favor de la visita sobre la parte final del primer
tiempo.
Tras el
descanso, Román vio la roja por golpear a Heredia y eso le permitió crecer a un
Italiano que se volcó al campo adversario y parecía que de tanto intentar iba a
gritar al menos una vez, pero repetía la misma falencia de siempre: no
concretar en la red lo que insinuaba.
La más clara
del local llegó a los veinticuatro cuando, tras un centro de Bordón desde la
derecha, Centeno tapó un cabezazo de Molina casi a quemarropa dentro del área
chica y el rebote capturado por Di Biasi terminó saliendo muy alto
Poco después
Barreal fue expulsado y al quedar diez contra diez, la historia pareció cerrase
porque el Azzurro debió reacomodarse y la intensidad para buscar el arco de
enfrente ya no fue la misma, aunque sobre el final Rojano igualmente contaría
con un par de oportunidades que no supo definir con precisión.
En
consecuencia, el empate terminó siendo un resultado pobre para Italiano porque
necesita imperiosamente sumar de a tres y de esa manera engrosar su bajo
promedio, mientras que para Almirante la sensación fue quizá un poco más
agradable por el hecho de haber sumado al menos un punto y de visitante luego
de dos derrotas consecutivas.Fotos: Myriam Celano