En su última presentación como local de este año, Sportivo Italiano alcanzó una victoria fundamental por la permanencia en la categoría al imponerse por 2 a 1 sobre General Lamadrid, quien se había puesto en ventaja y luego sufrió la expulsión de Pérez.
A los dos minutos Astudillo remató alto tras quedar mano a mano y a los seis el mismo delantero se encontró con el rechazo del uno tras un tiro libre de Britos desde la izquierda, lo que dejaba en evidencia que los de Ciudad Evita querían los tres puntos si o si.
Sin embargo, a los once el conjunto de Devoto aprovechó una pelota parada, que se originó en el sector derecho y que partió de los pies de Flegenal, para que Ledesma de cabeza mandara la pelota al fondo del arco para el 1 a 0.
Con la desventaja impensada y cuando las jugadas de riesgo no abundaban, el azzurro igualmente siguió yendo al frente y otra vez Astudillo desaprovecharía su oportunidad al desviar un cabezazo cerca del palo izquierdo.
El “Carcelero” se resguardaba, se mantenía firme en sus líneas y apostaba a salir rápido desde el fondo con pelotazos para la contra. Sin embargo, sufrió la expulsión de Pérez por un codazo y debió reacomodarse para no poner en riesgo la mínima ventaja que había logrado.
La situación parecía no variar pese a las diferencias numéricas, hasta que Rami aprovechó una salida defectuosa del fondo visitante para robar la pelota, le la cedió a Ronconi que subía por derecha y éste mandara el centro pasado para que Britos la empujara decretando el merecido empate en el cierre de la primera parte.
Correa ingresó por Rosa y los de Pascutti trataban de explotar especialmente el juego exterior. Ronconi se paraba casi como un volante más mientras que Pinto seguía proyectándose por la izquierda una y otra vez para buscar a los delanteros, a tal punto que a los cuatro un centro suyo dio en la parte posterior del travesaño cunado el arquero la dejaba pasar.
Un zurdazo de Britos daba en el palo izquierdo y se anticipaba a la segunda conquista de Italiano que llegaría antes del cuarto de hora mediante un estupendo remate de Rami desde afuera del área, ganándose los primeros aplausos de un público al que no termina de meterse en el bolsillo pese a ser el goleador del equipo.
Pese al manotazo salvador de Anconetani a poco de ponerse 2 a 1, el local tuvo un lapso netamente favorable como para estirar las diferencias y asegurarse el resultado. Sin embargo no lo supo hacer e inconcientemente le cedió algo de protagonismo a su adversario de tal manera que a cuatro del final casi se lo empata por un cabezazo del ingresado Benítez que se estrelló en el travesaño.
Hasta el mimado Verón, cuando ya se cumplía el tiempo reglamentario y tras una contra de Pinto, no supo definir solo frente a Granero y un defensor terminó rechazando debajo de los palos lo que podía haber sido el tercero.
No obstante llegó el final y se festejó largamente una importantísima victoria azzurra que sirve para alejarse justamente de su rival de turno en el descenso directo y asimismo acortar distancia de los de arriba en busca de evitar la promoción a la que está actualmente condenado.
