Con muy poco y sin ser superior, Sportivo
Italiano logró rehabilitarse de la derrota pasada frente a Dock Sud venciendo a
J.J. Urquiza como visitante en un partido que con el correr de los minutos se
fue desvirtuando con tres expulsados y ocho amonestados.
El local hizo un muy buen trabajo en la
primera parte con una defensa bien parada que no corría riesgos, más un medio
campo bastante sacrificado para el quite y con una interesante dinámica para
conectarse a los activos delanteros.
Por su parte, al “Azzurro” se le dificultaba
bastante hacerse del balón, carecía de creatividad ofensiva y tampoco lograba
desbordar por afuera como para llegar hasta el área de enfrente a través de
algún centro. Aún con esas falencias, hizo el primer llamado de atención de la
tarde cuando a los 16´ Gurrieri sacó un zapatazo que dio en el palo izquierdo y
se fue por el fondo.
Poco después, Tula le cometió falta a Torres entrando
al área y Mamberti no falló en la conversión, que ponía al local merecidamente
arriba en el marcador sobre un Italiano al que le seguía costando encontrar el
camino por la ausencia tanto de sociedades como de individualidades.
Ruibal desnivelaba con velocidad para eludir
rivales, pero no siempre terminaban bien sus jugadas y el empate parecía
estar lejos, hasta que a cuatro minutos
del descanso apareció Marclay por el costado derecho y lanzó un centro que
Malandra mandó al fondo del arco.
Era el momento justo para que la visita
consiguiera algo de calma y tratar de corregir sus falencias, pero el nivel
seguía bastante bajo, aún después de la expulsión de Torres, quien estando
amonestado se llevó la pelota con la mano y convertía (el gol obviamente fue
anulado) tras aprovechar una desinteligencia entre Bordón y Tula.
Pese a la inferioridad numérica, el conjunto
de Loma Hermosa siguió teniendo la
posesión, pero Ruibal en uno de sus
veloces arranques cruzó de derecha a izquierda, descargó con Malandra, este
para Archubi, el ex Los Andes la recibió entrando al área, Ianiero lo derribó y
Giambuzzi marcó desde el punto penal para dar vuelta la historia.
En un momento de fricción Ruibal opacó su
buena tarde al ser expulsado por un golpe a Monzón, mientras que Mamberti, que también
venía teniendo un aceptable desempeño, entró en la discusión y vio la segunda
amonestación que dejaba a JJ con nueve.
Pese a contagiarse de nerviosismo por la
expulsiones, el local no dejó de buscar el empate, incluso sumando al arquero al
ataque en la última jugada. Sin embargo, fueron los de Ciudad Evita quienes finalmente
pudieron festejar la obtención de los tres puntos, aun siendo conscientes de que
deberán mejorar mucho en lo futbolístico para mantener viva la chance de volver a la B.