Si bien
recién empieza la segunda rueda, para Sportivo Italiano era un partido más que clave,
una especie de final, de esos que valen seis puntos o como quiera llamarse. Sin
embargo, Colegiales fue quien pareció estar más consciente de lo que verdaderamente
se jugaba y cuando parecía estar hundido logró resurgir para dar vuelta el
resultado y quedarse con la victoria.
La mañana
estaba fría, pero en la cancha la temperatura fue levantando con el correr de
los minutos y con las constantes variables tanto en el trámite de juego como en
el resultado. Los de Ferraresi tuvieron su momento, pero se relajaron, no lo liquidaron
y el equipo de Munro tuvo un destello de lucidez para volver a vivir.
El “Azzurro”
trabajó tranquilo desde el comienzo, sin apresuramientos, aunque con cierta
falta de juego ofensivo a través de un generador o con las subidas por las
bandas, mientras que el dueño de casa se dedicaba a dar batalla en el medio
campo para que una vez recuperada la pelota buscar rápido a los de adelante.
De repente,
un contra iniciada por Coria, continuó en Alderete, participó Ruiz y cuando
parecía desdibujarse la jugada en la media luna apareció Archubi, quien habilitó
con un taco estupendo al “Mago” para dejarlo mano a mano y desatara el primer
festejo.
No cabe duda
que ese gol le dio un envión anímico más que importante a la visita, ya que tan
solo cuatro minutos después aprovechó un tiro libre pasado desde la izquierda,
que Guerra bajó de pecho para que Bordón sacara un derechazo que, luego de
pegar en el palo, se metió en el fondo de la red.
Sacar dos
goles de diferencia antes de la media hora no se da todos los días y menos en
un encuentro directo en la lucha por la permanencia. Sin embargo, Italiano
perdió a Coria por lesión y con el ingreso de Di Biasi se quedó sin delanteros
netos en la cancha, cuando estaba todo dado para noquear a un rival que ya
recibía los reproches de su gente.
El debutante
Beltramella rechazó hacia arriba un tiro libre de Ledesma que se colaba cerca
del ángulo superior derecho y cuando el balón cayó, una multitud de jugadores se
agolpó casi debajo del arco, unos para despejar y otros para convertir, aunque
la suerte estuvo del lado de los de Munro, ya que Ravest logró descontar.
Enseguida,
tan solo ciento veinte segundos más tarde, el mismo volante de “Cole” que llevó
el número ocho en su espalda volvió a ser verdugo de su ex club porque puso la
cabeza en un córner desde la izquierda y la pelota bajó sobre el palo izquierdo
para decretar la transitoria igualdad.
En un abrir
y cerrar de ojos todo se dio vuelta para los de Ciudad Evita y si algo le
faltaba era la expulsión de Francés por golpear a Ledesma. El tumulto
generalizado que se produjo en ese momento daba clara muestra de lo caliente
que se había tornado el partido, no por juego brusco, sino por nerviosismo lógico
que ocasiona este tipo de cotejos.
Tras el
descanso, fue a todo o nada. Al minuto Vazzoler cabeceó cerca del palo derecho,
luego un zurdazo de Sacatularo salió arriba del travesaño, Beltramella evitó el
festejo de Tossi, también apareció Alvarez para tapar un derechazo de Archubi más
el posterior rebote en Alderete y en la jugada siguiente se lo perdió Ledesma.
Hasta que llegó
la jugada decisiva y más protestada. Un despeje largo desde campo de Colegiales
superó a la última línea azzurra, el asistente levantó su bandera marcado off
side de Lucero, pero enseguida la bajó porque el balón cayó bien abierto a la
izquierda, por donde apareció Tossi habilitado y tras meterse en el área definió
entre el palo derecho y el arquero.
La historia
siguió con errores y descuidos defensivos de ambos lados que dejaron el
resultado abierto, aunque terminó siendo inamovible y el local festejó el
triunfo como si hubiese logrado un campeonato ante una nueva desazón para
Italiano, que arrastra tres derrotas y solo una victoria en las últimas cuatro fechas.