Debió pasar casi un mes sin festejos y sin hacer goles para que Sportivo Italiano volviera a sumar de a tres al vencer a San Telmo por 1 a 0, con gol de Gustavo Britos. De esta manera, el conjunto de Oscar Blanco achicó las diferencias que lo separan del líder Sarmiento y encara una semana de descanso por tener fecha libre el fin de semana previo al choque pendiente ante Nueva Chicago en Mataderos.Si bien no fue un equipo lúcido en su juego, el azzurro fue práctico y efectivo para anotar en el momento justo y luego aferrarse a la victoria con la solidez defensiva que lo caracteriza cuando se quedó con uno menos y el rival lo presionó en busca del empate que nunca llegaría
Después de tener su primer sobresalto a los tres minutos cuando Anconetani se interpuso justo al intento del goleador de la B, Sergio Rodríguez, el local fue apareciendo como el más insistente. Sin embargo, las llegadas se limitaban a centros enviados desde los costados, que generalmente caían en manos de Abraham o en la cabeza de algún defensor rival.
Además, como Britos era encimado por Saracini, tanto Fernando Rodríguez como Saccone se retrasaban unos metros para tomar posesión del balón y entonces en el área no quedaba quien la pudiese meter.
Por su parte, el conjunto candombero era más preciso a la hora de ir hacia el arco de enfrente y sus oportunidades más claras llegaron por vía aérea. A los 38 se lo perdió Montellano de cabeza tras un centro de la izquierda y antes del descanso fue Sever quien no apuntó bien y la palota salió sobre el palo derecho.
Para el complemento, Italiano mostró una mayor cuota de agresividad adelantándose en el terreno y a los nueve tuvo su premio cuando Britos capturó un rebote y metió un certero zurdazo hacia el fondo de la red.
Con ese gol en contra, a la visita no le quedó otra que arriesgar. Zacarías mandó a la cancha a sus tres hombres ofensivos del banco y así evitó que los laterales azzurros siguieran proyectándose con tanta libertad, aunque Heredia se las seguía ingeniando con su velocidad para complicarlos.
Rodríguez se iría lesionado a los 18, Blanco fue expulsado a los 25 e imprevistamente los de Ciudad Evita debían reacomodarse lo mejor posible para evitar sorpresas. Así Molina pasó a ser central, Schmidt ingresó como lateral izquierdo y Meza quedó como solitario puntero de un equipo que quedó casi completamente plantado detrás de media cancha.
No importaba que Meza, con tres hombres encima, fuese el único receptor en el área de un corner ejecutado por Britos desde la derecha, pues lo más importante por entonces era mantener esa mínima diferencia en el marcador, pero suficiente para cortar la sequía de festejos con la tan ansiada y extrañada victoria.
