La
estadística marca que los de “Fito” Della Picca convirtieron solo un tanto en
sus últimas seis presentaciones y sumaron su tercer empate consecutivo en cero,
mientras que el azzurro hace cuatro encuentros que no anota y en goles a favor
solo supera por uno a Lujan, que está último.
Estos datos
se reflejaron claramente en la soleada tarde sabatina, donde se enfrentaron dos
equipos bien parados a la hora de defender y carentes de ideas en el momento de
atacar. Además, poblaron con mucha gente la zona del medio campo a tal punto
que por momento había jugadores que superponían
posiciones chocando con los propios compañeros.
Empezó mejor
la visita presionando lo más adelante posible sin lograr ser un claro
dominador, por lo que con el correr de los minutos Lafe recuperó unos metros en
el campo, Fernández y Arriola les dieron trabajo a los defensores rivales, pero
no lograban complicar a Drago más que con algún centro.
La jugada
más clara de riesgo se produjo recién a los 36 cuando en un centro desde la
izquierda favorable al local atravesó toda el área y le cayó por el fondo a
Portillo, quien remató desviado.
Tras el
descanso la historia no cambió demasiado porque Italiano seguía ordenado,
mientras que al local se lo notaba algo nervioso ante la presión de su gente y
recién con los ingresos de Marecos y Castro volvió a insinuar algo cerca del
área contraria. Tal es así que en un lapso de solo cinco minutos provocaron casi
en simultáneo las amarillas de Perelman, Lamacchia y Bogao.
Del otro
lado Santorelli decidía mandar a la cancha a Federico Díaz para tratar de
aprovechar de contra los espacios que dejaba atrás su rival y casi cumple con
ese objetivo a los 35 cuando el ex delantero de Luján le robó la pelota a
Castro y el azzurro avanzó en superioridad numérica, pero la jugada se terminó
diluyendo.
Más tarde ingresó
Zalio con la misma misión de quebrar en velocidad a la última línea local y
llegar hasta un Anconetani que tuvo muy poco trabajo a diferencia de un Drago más
activo descolgando muchas pelotas aéreas y que, a minutos dos del final, se
lució desviando un cabezazo de Marecos por arriba del travesaño.
De esta
manera, tanto Lafe como Italiano se vieron imposibilitados de sumar de a tres para seguir acomodándose en sus respectivas
carreras por el ascenso, uno para pelearlo en forma directa y el otro a través
del reducido.