Cumplida justo una ronda desde la que fuese su última derrota, Sportivo Italiano superó a Atlanta por la mínima diferencia, tal cual había sucedido aquella vez a favor de los bohemios en la noche de Vicente López. De esta manera, el azzurro pudo estirar su ventaja a cuatro unidades en la punta de la tabla, teniendo en cuenta que su escolta Sarmiento cayó por goleada ante Comunicaciones.El encuentro no fue para nada lúcido futbolísticamente hablando ya que ambos se mantuvieron sólidos en el fondo y las escasas ideas para quebrarlas no eran lo suficientemente efectivas. Por eso la pelota se desplazaba entre una y otra área, pero rara vez entraba en ellas salvo esporádicos y tibios intentos, o mediante algún que otro centro de fácil contención por los arqueros.
Además, los pases tenían poca precisión, las sociedades de juego eran escasas o casi nulas y entonces ambos número uno fueron más espectadores que protagonistas durante casi todo el desarrollo de la parte inicial. Tal es así que la visita solo amenazó en forma circunstancial con abrir el marcador recién a los 40, cuando Marecos tiró un centro desde la izquierda, que se fue largo y pegó en la unión del poste izquierdo con el travesaño.
El segundo tiempo arrancó bastante parecido a lo que se vio en los primeros cuarenta y cinco minutos, con poco entusiasmo en las cercanías de los arcos. Agüero mandó a Ferreiro a la cancha para que Atlanta fuese más punzante sobre la última línea local, a la que solo pudo superar a los 20 con un disparo de media distancia que encontró bien parado a Anconetani.
Por su parte, Oscar Blanco buscaba variantes ofensivas con su reciente refuerzo, el delantero Ucha. Y vaya si no le dio resultado que en la primera aparición por la derecha cerca del área generó el tiro libre que Britos remataría en forma rasante para sorprender a todos y abrir el marcador.
Recién ahí, en desventaja, reaccionaron los de Villa Crespo en mirar con más intensidad el arco de enfrente, pero se encontraron con la solidez y guapeza de Maxi Blanco, que a medida que pasan los partidos se va consolidando como uno de los pilares de este equipo.
Al mismo tiempo crecería el trabajo del goleador de la tarde, tomando el control de la pelota y poniéndola debajo de la suela de su botín, para que los rivales solo pudiesen quitársela con infracción. Bajo su conducción y el atrevimiento del “Lobo” Saccone, Italiano cerró el trámite en el cuarto de hora final y desatar la euforia desmedida de los hinchas, que se quedaron cantando un largo rato bajo la lluvia una vez finalizado el partido.
