Hacía mucho que
el hincha azzurro no tenía una alegría, tal vez desde el último ascenso a la
Primera B Nacional. Si bien este triunfo no sirvió para subir de categoría, al
menos alcanzó para desatar un desahogo generalizado después de tantas pálidas
que viene atravesando en este último tiempo.
Era un
choque entre dos equipos con un mismo objetivo y tal vez por eso no arriesgaron
demasiado durante la primera parte, valorando más el orden defensivo para no
tropezar en el fondo y no arriesgarse tanto por buscar el arco de enfrente.
En un campo
de juego afectado por las lluvias, la pelota pasó de un bando a otro
permanentemente ante la imposibilidad de su correcto traslado y si a eso se le
suman los nervios lógicos por la difícil actualidad, el partido no resultaba
ser muy lúcido.
Recién a los
28 hubo cierto riesgo sobre el área visitante cuando una escapada de Soplán por
derecha terminó con un centro rasante que Rojano no llegó a interceptar,
mientras que siente minutos después fueron Drago y el palo derecho quienes
evitó la caída del arco local.
La segunda
parte no se diferenciaba mucho de la primera hasta que a los 17 Rojano conectó
un centro hacia la red desatando el primer grito atragantado de la tarde ante
un rival algo limitado y que poco después se quedaría con diez por la expulsión
de Crespín.
Tanto hacía
que no gritaba un gol y ganaba un partido que los de Garate trataron de
defender con uñas y dientes los tres puntos en momentos en que San Miguel se
jugaba todo en busca del empate que le diera algo más de vida hasta la última
fecha.
La
desesperación de la visita dejó algunos espacios que Italiano empezó a
aprovechar y así fue que Rosa a dos del final se vistió de goleador para
definir por encima del arquero para hacer explotar a todos por la salvación
definitiva.
Ahora se
vendrá un cierre de campeonato y el momento de evaluación general sobre el por
qué se llegó a este presente tan gris, casi negro, para no volver a repetir los
errores tanto en la conducción como futbolísticos que llevaron a Italiano a
jugar en una divisional que había sido archivada en el tiempo.