Un
inesperado traspié sufrió Sportivo Italiano en su carrera por el ascenso ya que
cayó justificadamente en su visita a Argentino de Merlo y ahora deberá aguardar
que Midland, a quien aventaja por un punto, no gane su partido para poder
mantenerse en la punta del torneo.
El nivel
futbolístico del conjunto de Mario Rizzi venía cayendo en las últimas
presentaciones y entonces para compensar esa falencia y asegurarse buenos
resultados, los jugadores debieron duplicar el esfuerzo físico, algo que en
esta oportunidad pareció jugarle en contra especialmente en la parte final.
El local no
se le achicó al puntero, sino que le hizo un planteo de igual a igual
presionándolo con intensidad en cada pelota dividida, tapándole las subidas por
los costados y rechazando todo lo que se aproximase a su área.
Todo
transcurría bastante parejo y ambos contaron con claras chances de gol, hasta
que Merlo supo sacar ventaja en una jugada desafortunada en la que Martínez
falló un despeje desde el piso y eso fue aprovechado por Romero para lanzar un
centro desde la izquierda que Jaime mandó a la red anticipándose a la marca de
Laso.
Pese a que
había contado con algunas ocasiones para anotar como un disparo de Burzac que dio
en el ángulo superior izquierdo, Italiano repitió algunos errores defensivos
que, como sucedió en partidos anteriores, lo dejaron abajo en el marcador y con
la necesidad de sacrificarse al máximo para dar vuelta la historia.
Tras el
descanso la “Academia” aplicó más firmeza en el fondo, mostró concentración en la
zona de los volantes y adelante fue fundamental el permanente desequilibrio de
Jaime para amenazar a la última línea visitante.
De esa
manera, los de Stagliano no sufrieron sofocones importantes pese a la libertad
con la que se movió Burzac para generar juego, ya que jamás encontró socios y
de esa manera todo se le hizo muy difícil a un Italiano que tampoco mejoró con los
cambios de nombres y posicionales que aplicó Rizzi.
Esa obligación
de revertir el resultado y ese ir para adelante provocó una vez más en la
visita cierto desorden e imprecisión a la hora de transportar el balón con más
ganas que ideas, algo que nuevamente fue aprovechado por su rival para estirar
la ventaja.
Faltaban
nueve minutos y Jaime seguía corriendo como si el partido recién hubiese empezado,
a tal punto que se fue hasta el fondo por la derecha y le dejó la pelota servida
a Villalba delante del arco para que decretara la victoria definitiva, que
ubica a la “Academia” en una posición expectante de cara al Reducido.
En tanto,
para Italiano quedó el sabor amargo de la derrota y la posibilidad perdida de
estirar la ventaja en la punta para afrontar con otra cara una semana activa en
la que visitará a Los Andes por la Copa Argentina y después recibirá a Español
en Ciudad Evita.