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sábado, 22 de marzo de 2014

Fecha 28: Liniers 4 – Italiano 0. La “Topadora” del gol

Para Sportivo Italiano fue una de esas tardes que deberá olvidar lo más rápido posible porque fue un equipo totalmente desconocido ante un contundente Liniers, que terminó pasándolo por arriba como quedó establecido en el marcador.
El declive futbolístico que venía teniendo el “Azzurro” en los últimos partidos se acentuó en el reducto de Villegas, donde cometió errores increíbles en todo aspecto y en todas sus líneas, algo que fue aprovechado por un rival inteligente y muy preciso para anotar cada vez que se le presentó una posibilidad de gol.
El conjunto de Mario Rizzi estuvo en la cancha solo en el primer cuarto de hora cuando jugó por abajo y abrió la por los costados para llegar al área de enfrente con un par de chances claras de Di Biasi y Rojano como para ponerse en ventaja.
Del otro lado, la “Topadora” implementaba la idea de mantener el orden ante el lógico protagonismo que intentaría imponer el rival y empezó a morder en todos los sectores para obtener el balón, con Díaz como eje. Justamente el número diez, a los 27 se la cedió a Cáceres, quien metió un zurdazo inatajable para poner en ventaja y darle impulso anímico a su equipo.
Pese a la desventaja inicial, Italiano siguió buscando y pudo igualarlo en una que tuvo Kissner y ganó el uno, pero su defensa se mostró muy endeble a tal punto que dos envíos aéreos de Díaz terminaron con cabezazos de Lobótrico y Torres en el fondo de la red para cerrar el primer tiempo tres goles arriba.
Algunos recordaban el partido de Liniers de la semana anterior en el que ganaba por la misma diferencia y después se lo igualaron, pero en esta oportunidad no corrió riesgos porque en la visita siguió predominando la confusión y sus intenciones de revertir la historia fueron intrascendentes durante toda la segunda parte.
Los cambios realizados por Rizzi tampoco hicieron efecto, porque no pudo recuperar la mitad de la cancha y menos hilvanar alguna jugada asociada como para que Rojano o Kissner, y un rato después Galeano, pudieran gritar al menos para descontar y que la derrota fuese más decorosa.
Nada le salía al conjunto de Ciudad Evita, las desatenciones se repitieron y eso desencadenó la llegada del cuarto gol para sellar una derrota categórica y preocupante, con el único aliciente de que sigue en la punta gracias a que los de atrás por ahora no se le acercan.