Cuando la luz del sol le dio paso a la iluminación artificial en la segunda etapa, Sportivo Italiano tuvo uno de los mejores rendimientos en lo que va del campeonato pero la falta de precisión en el toque final y algunas muy buenas intervenciones del uno rival le impidieron quedarse con los tres puntos.
J.J.Urquiza se encontró con una ventaja imprevista de entrada y desde ese momento se limitó a mantenerla, sin arriesgar demasiado más allá de alguna incursión en ofensiva por el sector derecho, donde su rival se mostraba algo flexible.
Ese gol tempranero lo golpeó mal al azzurro, a tal punto que jugó casi toda la primera parte invadido de imprecisiones y nerviosismo, especialmente por la zona de Nicolás Gauna y Mariano Díaz, quien pareció sentir un poco l falta de ritmo por la lesión que lo marginó de los últimos partidos.
Las únicas insinuaciones del local hacia el área de enfrente llegaban generalmente por el lado de Mendoza y Zalio, pero no traían peligro. Solo una escapada de Federico Díaz justamente por la derecha derivó en un centro corto y bajo al primer palo que Gauna terminó rematando afuera.
El ingreso de Soliño para el complemento tuvo sus frutos al minuto porque Cobelli ejecutó un corner desde la derecha, Mariano Díaz cabeceó y Noy dio rebote, pero apareció el juvenil surgido de las Divisiones Inferiores para mandarla a la red decretando la igualdad en uno.
Italiano tomó impulso tras la conquista y empezó a elaborar muchas jugadas en ataque, como no había hecho a lo largo de lo que va del campeonato. Con toques cortos, abriendo el juego y volcado completamente en campo contrario empezó a hacer méritos para dar vuelta la historia.
A los tres minutos Zalio hizo la individual y su remate dio en el palo izquierdo. A los diez Lamacchia interceptó de cabeza un corner desde la derecha y Noy se lució sacándola nuevamente al tiro de esquina.
Los de Loma Hermosa la pasaban mal, se habían retrasado bastante en el campo y recién niveló cuando el azzurro levantó un poco el pie del acelerador. Con el ingreso de Makalik renovó un poco el aire en ofensiva, pero dependía siempre de algún contragolpe que no llegaría a destino o de un par de tiros libres sin consecuencias.
Faltando siete para el final, Drago dejó la cancha por un golpe e ingresó Hourcade, quien casi no llegó a transpirar su buzo porque Italiano volvió a hacerse dominador absoluto y volvió a hacer méritos para quedarse con la victoria.
A los cuarenta Cobelli abrió a la derecha para el incansable Mendoza y su centro rasante cruzó toda el área sin que ningún compañero la empujara. Se jugaba el tercer minuto de los cinco adicionados y quien se lo perdió fue Heredia tras otra buena aparición de Mendoza por su sector.
Para el final quedó un corner desde la izquierda que, tras dos cabezazos, terminó encontrando el arquero visitante para asegurar un empate que dejó a los de Ciudad Evita con un sabor amargo por el resultado, pero con la tranquilidad de haber encontrado en el segundo tiempo el juego y la actitud que tanto se le reclamaba.